El embarazo es la etapa más importante para una mujer, más aún si es primeriza.Hay dudas y temores que como toda madre una siente y por eso es importante visitar al ginecólogo para saber cómo va desarrollándose nuestro bebé.
Varias personas conocidas mías me preguntaron en más de una oportunidad por qué anuncié mi embarazo a los 5 meses y no antes. Debo confesar que he evitado contestar esa pregunta pero hoy deseo decir lo que realmente pasó.
Cuando Alonso y yo decidimos viajar a Piura para decirle a su familia la hermosa noticia que seríamos padres sucedió algo inesperado, a las seis semanas de embarazo tuve una amenaza de aborto que me ocasionó varios sangrados.
Realmente me sentía terrible porque pensé que no me había cuidado bien, pero mis dudas fueron despejadas por mi amiga que es doctora quien me dijo que una infección urinaria durante el embarazo es normal ya que la mayoría de mujeres embarazadas la padece.
Cuando ella me dijo eso mi estado emocional mejoró y dejé de sentirme culpable de estar así. El tratamiento para esta infección urinaria consistía en 21 pastillas y óvulos. Las pastillas debía tomarlas por 7 días y los óvulos colocármelos de día y de noche.
Estaba todo el tiempo acostada en cama con las piernas en alto porque no podía realizar esfuerzo y les juro que me daba miedo hasta de ir al baño porque temía sangrar. Alonso, su papá y demás familiares venían a visitarme y a cuidarme.
Tenía que realizarme cada 4 días ecografías transvaginales para ver cómo estaba mi bebé porque tenía un hematoma retrocorial que es un tipo de hematoma de la placenta que ocasionó mi amenaza de aborto y por eso ocurría el sangrado, mencionó el doctor.
Otra explicación que me dio fue que un hematoma retrocorial es como un moretón que si me aplico una crema con el tiempo va desapareciendo. En este caso me colocaba los óvulos para ayudar a fortalecer el cuello uterino y reducir el riesgo de parto prematuro.
Por eso era super importante que esté en cama y full cuidados porque si no lo hacía y seguía con mi vida normal mi placenta podía afectarse y disminuir el intercambio de alimento entre mi bebé y yo, o sea podía terminar perdiendo a mi bebé.
Todos los días recibía palabras de aliento a través de llamadas de las personas que tenían conocimiento de mi estado. Les agradezco de corazón por el apoyo brindado.
También agradezco a mi grupo de amigas que padecen de tiroides como yo, ellas estuvieron mañana, tarde, noche y madrugada brindándome su apoyo vía whatsap porque son de diferentes países.
También recibí apoyo psicológico para superar esta dura etapa porque estar emocionalmente bien era necesario y super importante, como sería mamá tenía que estar bien para cuidar a mi bebé.
Alonso y yo regresamos a Lima luego de 30 días, no podíamos regresar antes porque tenían que parar los sangrados. En Lima continué con los cuidados y demás controles.
Siempre oraba y le pedía a Dios fuerza, confieso que dentro de mi corazón siempre supe que mi bebé nacería sanito. Este bebé era un bebé muy deseado, querido por todos. Un milagro de Dios.
Doy este testimonio para que si alguna mamita está pasando por lo mismo busque apoyo psicológico porque es muy importante estar bien emocionalmente, debe apoyarse en el amor de su pareja, familia y amigos. También seguir cuidadosamente lo que le dice su doctor.
Gracias por tomarse el tiempo de leer esta publicación, Dios los bendiga. En esta fotito ya no tenía sangrados, mi bebé estaba bien y jugando boca abajo con casi 12 semanas. Besitos de parte de Amy. Mucha fuerza mamitas. 😘😘😘
